"Señor Presidente y Honorable Directorio del Club Aéreo Comodoro Arturo Merino Benítez; Señores Instructores de Vuelo; Distinguidas visitas; Camaradas Aviadores todos.
Deseo muy sinceramente agradecer la gentil invitación que me han formulado para participar en la celebración del cuadragésimo quinto aniversario de la fundación de nuestro club.
Para mí, usando una manida frase; ver la concreción de un “Sueño hecho Realidad”.
Meta que un grupo de entusiastas funcionarios de la Dirección General de Aeronáutica Civil nos propusiéramos en 1979, cuando ya nos sentíamos capaces de iniciar los trámites para crear un club aéreo.
Seamos honestos y reconozcamos que no teníamos nada. Ni dinero, ni medios para hacernos al aire, pero sí lo principal. Un ferviente deseo de seguir el ejemplo de claro de volar con nuestras propias alas y hacerlo como correspondía.
Nos motivaba el legado que nos dejara la figura señera del Comodoro Arturo Merino Benítez, “Combatiente y combativo” como alguien lo definiera.
Precursor que sin contar con casi nada, ante la oposición de muchos y la indiferencia de otros, dio el impulso y causa legal y reglamentario a la aviación deportiva, comercial y militar de la patria.
Basados en su ejemplo nos trazamos pocas metas que se pueden resumir en los siguientes principios:
Volar por el placer de volar
Fomentar la camaradería aeronáutica, evitando las naturales diferencias que entre nosotros sería normal se produjeran.
No pretender tener más material de vuelo que aquel que estuviéramos en condiciones de operar y mantener.
Y por sobre todo; Cuidar la seguridad de vuelo, recordando lo que dijera un recordado aviador; “Hay pilotos viejos y hay pilotos arriesgados, pero no hay pilotos viejos arriesgados”.
Premisas que no me cabe duda se han cumplido y son ellas las que nos permiten celebrar lo que hoy nos congrega.
De aquellos entusiastas de antaño, varios ya no nos acompañan, algunos se han incorporado a la Escuadrilla de las Alas del Silencio.
Vaya para ellos nuestro reconocimiento y gratitud.
Ahora corresponde a Uds. coger el bastón de la posta y con iguales sentimientos seguir la ruta que otros les trazarán.
Al finalizar estas palabras que nacen del alma, permítanme manifestar también mi reconocimiento más sincero a los hijos del Comodoro Arturo Merino Benítez, quienes en un ya 1979, depositaran su confianza en nosotros y nos concedieran autorización notarial para bautizar con el nombre de su ilustre padre, aquellas alas que tímidamente comenzaban a ascender a los cielos patrios.
Impulsadas más por el corazón de sus pilotos, que por la escaza potencia de los motores frágiles Champion.
Estoy cierto que esta noche de alegría, desde el cielo, sonriente él nos estará mirando, con esa mirada de hombre bueno que lo caracterizaba.
Camaradas, para todos un fuerte abrazo."
Sergio Barriga Kreft
Por Camilo Contreras Carvajal